LA PALETA DE QUICO

¿Alguna vez viste “El Chavo del 8”?, un programa infantil muy antiguo… “El Chavo” es un niño huérfano, sin hogar y muy pobre que vive dentro de un barril en el patio de una vieja vecindad de barrio. . En la vecindad tiene varios amigos, uno de ellos es “Quico”, hijo de Doña Florinda, una mujer viuda. Ella consiente y mal cría a su hijo, dándole hasta el más mínimo capricho a su único hijo (“Tesoro”). Quico entre otras cosas es presumido y envidioso. El siempre tiene la pelota más grande, el helado más grande, el globo más grande… Disfruta salir al patio de la vecindad y presumir a todos sus “adquisiciones”.

En uno de tantos capítulos, sale a su patio saboreando y relamiéndose los labios, comiendo una tremenda paleta multicolor de dulce. El “Chavo” lo ve, se le hace agua la boca, se la saborea y se acerca a Quico con la esperanza de que le convide…:

- Quico: ¿Ya viste la paletota que me compró mi mami, Chavo?, está riquísima… ¿Quieres?
- Chavo responde: ¡¡ Sí!!
- Quico contesta: ¡¡ Pues compra ¡!!
- El “Chavo” termina yéndose tristón y se esconde en su barril a llorar sus penas…
- pipipipipipipi (solloza el Chavo)

Pensando en Isaías 61:1-3 y 6-7, Dios me hizo meditar -la verdad que me sentí como Quico-, veamos con atención; los siguientes pasajes:
1 El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; 2 a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; 3 a ordenar que a los afligidos de Sión se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya. 6 Y vosotros seréis llamados sacerdotes de Jehová, ministros de nuestro Dios seréis llamados; comeréis las riquezas de las naciones, y con su gloria seréis sublimes. 7 En lugar de vuestra doble confusión y de vuestra deshonra, os alabarán en sus heredades; por lo cual en sus tierras poseerán doble honra, y tendrán perpetuo gozo.



(Te lo explico en Lenguaje Sencillo por si no entiendes…)



1 El Espíritu de Dios está sobre mí, porque Dios me eligió y me envió para dar buenas noticias a los pobres, para consolar a los afligidos, y para anunciarles a los prisioneros que pronto van a quedar en libertad. 2 Dios también me envió para anunciar: “Este es el tiempo que Dios eligió para darnos salvación, y para vengarse de nuestros enemigos”. Dios también me envió para consolar a los tristes, 3 para cambiar su derrota en victoria, y su tristeza en un canto de alabanza. 6 Ustedes serán llamados “Sacerdotes de Dios”, “Fieles servidores de Dios”. Disfrutarán de las riquezas de las naciones y se adornarán con sus magníficas joyas. 7 Porque ustedes han tenido que sufrir el doble de lo que se merecían, y los han llenado de vergüenza y de insultos. Por eso recibirán doble porción de riquezas y para siempre vivirán felices.”

Éste pasaje me parece maravilloso. Cada vez que escuché predicar o lo leía en la Biblia seguía pareciéndome maravilloso. Para qué decir cuando Jesús lo lee en plena sinagoga y les dice a sus “hermanitos” que ese día se había cumplido esa profecía delante de ellos (refiriéndose a sí mismo). (Lc.4:16-30)

Como sabemos, se armó la grande, a varios se les cayó el pelo, otros se pusieron morados de rabia y quisieron tirarlo cerro abajo, para matarlo. ¿Cómo se le ocurría decir semejante blasfemia? ¿El Hijo de Dios?, a dónde la vio? ¿Tener la capacidad para hacer todo lo que allí dice?... ¡Qué locura!

Me parecía un pasaje maravilloso digno del Hijo de Dios… pero NUNCA pensé que el día de hoy está dirigido a mí. ¿Yo?, ¿Ungido, elegido y llamado para hacer qué…? ¿Ir a predicarle a quiénes?, ¿Orar para que se sane quién?, ¿liberar a un preso?... ¡¡NO…!! Eso es para los pastores, para los grandes evangelistas o los líderes de las Iglesias…
Como que sería mucho atrevimiento apropiarme de ese “derecho”, ¿no?



¡¡ Craso error!! Nos volvemos dependientes del pastor y de paso “les recargamos la mata”. Al parecer las oraciones de los pastores surgen más efecto que las mías…
Nos “enamoramos” de la voz de nuestros pastores, nos acostumbramos a su tonito, a su estilo... Es más, cuando se enferma, está de vacaciones, o predica otra persona… ¡¡ como que no es lo mismo!! ¡¡La cosa no funciona igual!!

Que locura, que ciegos y qué ¡¡SORDOS!! Debiéramos aprender de nuestras lanudas amigas, las ovejas.
En Juan 10:3-5 Dice claramente que “el pastor llama a cada una de sus ovejas por su nombre, y ellas reconocen su voz. Las ovejas siguen al pastor porque reconocen su voz, incluso ¡NO seguirían a un desconocido; más bien huirían de él, pues no reconocerían su voz!”.

La Palabra de Dios es la que nos cambia, es la voz de Dios la que debemos aprender a escuchar y reconocer… Una vez que lo hacemos el Espíritu Santo nos da la revelación, y aunque en ocasiones no entendemos completamente, decidimos creer a Dios, le obedecemos o sea aceptamos la responsabilidad, nos salimos de nuestra zona de comodidad y ponemos por obra lo que nos ha encomendado.

Debemos dejar de pasearnos por nuestra “bonita vecindad”, presumiendo de nuestros privilegios como hijos “mal criados” de Dios. Y en lugar de compartir lo que tenemos, mandamos a las personas “a comprarse su “paleta” a otro lado, (por no decir “a la punta del cerro”); siendo que la nuestra es suficientemente grande y alcanza de sobra.



ESCUCHEMOS, RECONOZCAMOS, OBEDEZCAMOS, HAGAMOS… y la cosa cambiará sustancialmente.

Si escuchaste y reconociste la voz de Dios, deja a un lado las voces ajenas que te dicen lo contrario. Esta misma palabra está vigente, es verdad y está dirigida a ti y a mí. Es momento de salir y compartir todas las riquezas de Su gloria…
Me explico:

- Comienza a ver las necesidades que existen a tu alrededor…
- Di “la” palabra que alguien necesita escuchar y muchos conocerán a Jesús.
- Da palabra de consuelo y una depresión se transforma en gozo, donde solo había oscuridad, entrará un rayo de sol. Donde apestaba a muerte, olerá a flores…
- Desata amarras que encadenan a personas y podrán conocer la verdadera libertad. - Donde solo se respira odio, se transformará en perdón y reconciliación.
- Ora por un enfermo ¡¡y se sana!!



Señor, abre nuestros ojos ayúdanos en nuestra debilidad y perdona nuestra incredulidad o comodidad. Deseamos de todo corazón creer y transformarnos en “Sacerdotes de Dios”, “Fieles servidores de Dios”… y disfrutar de las riquezas de las naciones y adornarnos con sus magníficas joyas.”